martes, 5 de enero de 2016

MI MEJOR REGALO DE LOS REYES MAGOS.

                                                                               




   Esta mañana al levantarme he corrido con la ilusión de un niño al zapato que dejé ayer a ver si los Reyes, los de verdad, los de Oriente, me habían dejado algo especial, ya que siempre me dejan ropa, complementos y a veces, algo más.

  Pero esta mañana, una extraña sorpresa me ha dibujado una sonrisa en la cara. Al acercarme he visto un paquete envuelto en una especie de hilo de seda blanquecino, sobre el que habían dejado ésta nota: "Éste es nuestro mejor regalo; llévalo siempre contigo".

  Inmediatamente, lleno de curiosidad y emoción me puse a abrirlo.

  Ante mis ojos apareció un fino librillo elegantemente encuadernado con éste título : Regálate la Vida.

  Extrañado abrí el libro y lo ojeé con rapidez. Estaba lleno de hermosos dibujos de un estilo parecido a las ilustraciones de Gustavo Doré, con paisajes mágicos, árboles retorcidos con curiosas formas, mares llenos de caracolas como de cuento, montañas en perspectiva con preciosas vistas de la lejanía entre sus valles. Pero lo que más me llamó la atención fue que entre tanto dibujo, se intercalaba a grandes letras, el texto, conciso y muy espaciado. Empecé a leer:

  "¡Regálate la Vida! ¡Cuántas veces has deseado hacer cosas que te han parecido temerarias, imposibles o ilógicas y has desistido de hacerlas! Te han educado para ser correcto, para hacer lo que se considera normal y no salirte del camino establecido. Y claro, te has quedado con ganas de hacer aquello que no entraba en la supuesta regla de lo que deberías hacer o no hacer.

  Piensa que el tiempo pasa, pasa la Vida, dentro de unos años ya no podrás realizar aquellos caprichos que soñaste. ¿Te has planteado qué hubiera sucedido si hubieras realizado aquél viaje tan lejano y duradero? Quizá el destino, tu destino particular hubiera tomado otro rumbo diferente, mejor o ¿peor? Pero ¿hay algo peor que la insatisfacción que produce no haber abierto un nuevo camino que te atraía?

  Regálate la Vida. La vida, tu Vida. No es regalarte un buen traje, un nuevo ordenador, un nuevo coche. Ni siquiera regalarte un homenaje en aquél gran restaurante al que nunca habías ido antes por su elevado coste. Todo eso tarde o temprano lo harás con dinero, quizás, si verdaderamente te interesa. Pero ¿y de aquélla aventura que no quisiste tener por si te caías, montar en la barcaza de Manuel un día de pleamar en busca de buena pesca? ¿Te has preguntado cómo se ve el mar desde una pequeña barca al amanecer?

   Sí amig@, la Vida pasa y el tiempo que pierdes sin hacer "esas pequeñas locuras que a veces se te han ocurrido" sin saber cómo
es un tiempo que nunca más volverá. Y además siendo así, ecléctico, sin arriesgarte a vivir vivencias nuevas, originales y caprichosas, vas modelando poco a poco una persona aburrida, predecible que ni siquiera aguantas tú.

  Regálate la Vida, AHORA MISMO YA, que es tarde para vivir, siempre es tarde si nunca te decides a cambiar la concepción de tu
destino desde ya, día a día. Sal hoy. Vete lejos, corre riesgos que te hagan sonreír, si te caes, te levantarás, seguro que si algo te duele no será grave, y si lo es, más aún es no hacer nada que se salga de lo que se espera de ti. La inanición de aventura es causa de las mismas enfermedades que el sedentarismo. 

  Regálate Vida. Sorprende a quienes tienes a tu alrededor sorprendiéndote primero a ti mismo con tu actitud renovadora a cada instante. ¿Por qué no hacer eso que tanto he temido otras veces si intuyo que me dibujará una sonrisa? ¿Acaso falto al respeto a alguien o daño a algunos de mis seres queridos si me empeño más a fondo en ser un poco intrépido?

  No te aburras a ti mismo ni a nadie con el traqueteado cuento de "Cuando yo era joven..." ¡SÉ JOVEN AHORA! Deja el pasado que entierre al pasado. Vive hoy. Para eso tendrás que entrenarte un poquito cada día. Ahora sin ir más lejos, deja por unos momentos éste librito y sal a la calle, camina, regálate el día para ti y haz algo que te parezca una pequeña locura sin dejar de respetar tu entorno. Haz algo que te haga reír. Eso te dará una medida exacta de tu estado de juventud actual y de tu compromiso vital contigo mismo en exclusiva. Después regresa a tu sitio y retoma tus rutinas. Procura hacer éste ejercicio con bastante asiduidad y hacerlo progresivo con diferentes actuaciones y actividades.

  Ser ahora joven es no echar de menos tu lejana juventud, sino vivirla ahora con el saber que otorga el paso del tiempo. Sorprenderte a ti mismo tú mismo, es el mayor regalo que puedes hacerte y es el mayor seguro que puedes hacer contra cualquier tipo de enfermedad. Renuévate cada día y deja atrás tu vieja piel de serpiente para nacer de nuevo. Así se llega a ser joven y longevo. Te lo dicen los magos de Oriente, todos los magos de Oriente. Sigue sus sabios consejos.

  Con una enorme sonrisa furtiva, he cerrado el librillo y he salido a jugar con la mañana.............